Alba Morillo Moruno

Azuaga - CARTAS DEL LECTOR -

Esta despedida no era la que habíamos pactado, pero, parece que esto va llegando a su fin. De hecho, te has convertido en uno de los años que me ha hecho vivir las historias más difíciles. Esas que jamás se olvidan y que siempre llevaré en mi mochila. Cuando comencé a dar mis primeros pasos a tu lado, allá por enero, jamás pensé en todas las lecciones que me tocaría aprender. De haberlas sabido, te aseguro que hace tiempo, ya te habría soltado mi mano.

Sin previo aviso, me demostraste que, a veces, la vida no es justa. Que todo puede cambiar en cuestión de minutos. Que te puedes llevar a quien no lo merece. Que absolutamente nada es más importante que mi salud y la de todos los que me rodean. Y que vivir es urgente.

A pesar de todo, quiero y necesito quedarme con todo lo bueno. Y es que, me has hecho crecer. He cumplido varios sueños que jamás pensé que podrían salir de mi mente. He visto la madrugada más bonita del año. He disfrutado como nunca de cada rincón de mi ciudad favorita. He valorado cada atardecer que he vivido con la gente que me quiere. He disfrutado de mi mejor versión. Y también, he reído mucho.

Y a ti, 2023, ya estoy escribiéndote, pero por favor, pórtate bien y no te lleves a nadie de los que me rodean.